Pasajeros a bordo del vuelo 2417 de Delta Airlines vivieron un momento inesperado cuando un panel del techo colapsó poco después del despegue. Tom Witschy, de 35 años y residente de Chicago, relató a PEOPLE lo ocurrido durante el vuelo que partió de Atlanta rumbo a Chicago el 14 de abril, pero que tuvo que regresar debido al incidente.
“Durante el despegue, mi compañero de asiento y yo escuchamos un sonido que pensamos era una maleta golpeando un compartimiento”, dijo Witschy, que estaba en el asiento 19B. “Poco después, un panel del techo se desprendió con un fuerte golpe, casi impactando a una mujer mayor en el asiento frente a nosotros.”
El panel quedó colgando de una esquina, y tanto Witschy como otros pasajeros comenzaron a sostenerlo para evitar que cayera completamente. Según contó, lo mantuvieron en su lugar con las manos por entre 30 y 45 minutos mientras los asistentes de vuelo informaban a los pilotos y buscaban una solución.
Una pasajera, ingeniera de profesión, inspeccionó la zona y descubrió que faltaba un tornillo clave. La solución improvisada llegó de otro pasajero que ofreció cinta adhesiva amarilla, con la que finalmente se aseguró el panel de manera provisional.
“Aunque las azafatas fueron amables y nos ofrecieron bebidas gratis, todos dijimos: ‘Es temprano, estamos bien’”, comentó Witschy, agregando que, pese a estar más cerca de Chicago, el avión dio la vuelta a Atlanta. “Lo que debió ser un vuelo de poco más de una hora se convirtió en un día entero perdido.”
Por su ayuda, los pasajeros que sostuvieron el panel recibieron 10,000 millas como compensación. Witschy también presentó una solicitud de reembolso por el tiempo y trabajo perdido.
Delta, por su parte, se disculpó por el inconveniente y confirmó que el avión, un Boeing 717, volvió a Atlanta por “mantenimiento de cabina” y que el viaje continuó unas dos horas más tarde en otra aeronave. No se reportaron heridos.